Situación
Al igual que la electricidad y el gas natural, el aire comprimido es un servicio que se utiliza para trabajar. La mayoría de los gerentes de planta están muy conscientes del uso de los servicios en las instalaciones de fabricación, porque pueden generar costos considerables. Algunos desafíos que presenta el aire comprimido:
- A diferencia de la electricidad o el gas natural, el aire comprimido se produce in situ. El compresor recibe energía de otra fuente que se puede medir, ocultando los costos verdaderos al mezclarlos con todos los demás usos de ese servicio.
- Puntos de desperdicio de energía, como fugas de aire comprimido (a diferencia de una fuga de gas o el corte de un cable eléctrico), no producen olor ni provocan un incendio, no alarman a nadie y es probable que pasen relativamente inadvertidas. Por ejemplo, muchas veces los empleados de mantenimiento instalan una válvula en el fondo de un recipiente de filtro para asegurarse de poder drenar el condensado. Esto puede funcionar, pero el costo asociado con los desperdicios de esta práctica puede ser extremo. Con la variación de las condiciones atmosféricas y las estaciones, la humedad del aire también cambia, por lo que se requieren ajustes constantes. Los dren automáticos con cero pérdida de aire UFM-D de Donaldson están diseñados para eliminar estas pérdidas y manejar automáticamente la cantidad de condesado según varíe.
¿Cuál es el problema de las fugas de aire comprimido?
Las fugas que se van acumulando hasta sumar el equivalente al área de superficie de un agujero de 0.25” pueden fácilmente generarle a una planta un costo adicional de $15,000 al año en gasto operativos solo por la generación de aire comprimido adicional que se requiere. Estos usos artificiales de aire también se suman a la cantidad de aire que debe fluir por las tuberías, aumentando las velocidades y, por ende, la caída de presión en todo el sistema. Básicamente, las fugas pueden ocasionar que tanto las tuberías como los filtros parezcan ser de tamaño insuficientes, y con un equipo insuficiente es más difícil suministrar la cantidad correcta de aire al uso final sin tener que aumentar la presión. Cada equipo en un punto de uso extrae energía térmica del aire comprimido al permitir que un determinado volumen de este aire se expanda y baje de temperatura. Cuando algo no funciona correctamente, la primera respuesta puede ser aumentar la presión. Sin embargo, cada aumento de 2 psi en la presión del sistema cuesta aproximadamente 1 % más de energía de entrada, y esta presión aumentada empeora cualquier pérdida de fuga que ya exista.
Solución
Las personas suelen aumentar la presión del sistema cuando su equipo no está obteniendo la cantidad o presión correcta de aire. Además, es fácil hacerlo. Un método mejor es observar el sistema entre el compresor y el punto de uso y minimizar las pérdidas de presión en esa área.
Los filtros contribuyen a la caída de presión del sistema y se deben examinar. Los filtros Donaldson están diseñados específicamente para proporcionar la caída de presión más baja posible, y en general se pagan solos en muy poco tiempo gracias al ahorro de energía que proporcionan. Por ejemplo:
- Un compresor de 150 hp requiere de una potencia eléctrica de aproximadamente 120 kW
- Una reducción de 2 psi en la caída de presión ahorra hasta 2 % de consumo de energía
- En 120 kW, una caída de presión de 2 psi menos corresponde a 2,4 kW menos de consumo energético
- En 8.000 horas de funcionamiento al año con $0.10 por kW/h, obtenemos una suma de $1,920 anuales
Una reducción de la caída de presión de 2 psi (un ahorro de $1.920 en este ejemplo) se puede lograr de inmediato al cambiar filtros de aire comprimido de muchas marcas por filtros serie DF de Donaldson con tecnología UltraPleat™. Los costos de los filtros se compensan fácilmente con el ahorro de energía, y además obtiene con ellos la máxima protección para el equipo de la planta.
